Son cursos totalmente vivenciales donde ofrecemos a los maestros dinámicas para aplicar en el aula. Como bien dijo Benjamin Franklin;

“Dime y lo olvido, enséñame y lo recuerdo. Involúcrame y lo aprendo”

Por este motivo, les hacemos vivir a los maestros las dinámicas que posteriormente aplicarán con los niños, así aprenden la metodología y conectan con el impacto que tienen estas dinámicas y en lo que sentirán los niños.

Trabajamos con herramientas del mundo del coaching, de la educación, de la pedagogía sistémica y del crecimiento personal para que los maestros ayuden a crecer a los niños creyendo en su potencial, en sí mismos y ofreciéndoles herramientas para poder afrontar los retos y obstáculos que se encontrarán en la vida.

Además, al experimentar estas dinámicas, los maestros amplían su vocabulario emocional, aprenden a gestionar las emociones de los niños, se cuestionan creencias que nos condicionan a la hora de enseñar a los niños, aumentan su autoestima, mejoran las relaciones en el claustro, mejoran las relaciones externas y consigo mismos, trabajando todos los ámbitos de la Inteligencia emocional; Autoestima, Motivación, Habilidades sociales, gestión de emociones propias y ajenas, empatía…

Tenemos dos tipos de cursos:

Maestros particulares, donde el maestro se apunta a uno de nuestros cursos con un programa muy completo de educación emocional y tendrá la oportunidad de conocer y compartir experiencias con otros educadores.

Claustro escuela: Cuando un equipo directivo quiere formar a su equipo en inteligencia emocional o por necesidades emocionales de equipo, mejora de las relaciones entre el equipo, falta de implicación, falta de entendimiento entre los maestros y el equipo directivo… Entre otras.